Un llamado a la accion - ALBORES del mundo venidero

Es muy interesante que el libro del Apocalipsis, colmado como está de extraños y misteriosos símbolos proféticos, comienza con una serie de breves y aparentemente sencillas cartas a siete iglesias un tanto oscuras hacia el primer siglo en Asia Menor.

El apóstol Juan escribe en Apocalipsis 1:10 (Versión Reina - Valera 1960) que él estaba "en el espíritu en el día del Señor." Puesto que este último libro de la Biblia contiene en sí mismo casi exclusivamente eventos de orden teológico y político que sacudirán al mundo al final de la era actual, parece improbable y hasta ilógico que Juan esté refiriéndose aquí a un día de la semana en particular. Muchos interpretan que esta expresión corresponde al primer día de la semana, pero tal conclusión carece de fundamento en la Escritura.

La escena del tiempo en este enigmático libro no corresponde a un domingo o algún otro día de la semana. Es el Día del Señor, o como la Escritura lo confirma reiteradamente, ¡el gran y terrible DIA DEL SEÑOR!

Este libro, a menudo difícil de entender, concuerda perfectamente con las detalladas e igualmente inexplicables profecías del Antiguo Testamento, las cuales describen y enfocan un tiempo futuro conocido, como “¡el Día del Señor!” Ese trascendental período en el que el misericordioso Dios intervendrá en los asuntos del hombre, traerá rápidos y calamitosos acontecimientos sobre esta tierra, interviniendo dramáticamente al enviar de nuevo a Su Hijo a este mundo perverso para sofocar toda rebelión, desterrar a Satanás, el demonio, y establecer el tan anhelado Reino de Dios. Es sobre esta extraordinaria serie de eventos del tiempo del fin que el libro del Apocalipsis habla de manera elocuente.

Las cartas a las siete iglesias han planteado siempre un problema para los estudiosos de la Biblia. ¿Por qué razón están en la parte inicial del libro de Apocalipsis – capítulos 2 y 3? Más importante aún, se supone que deben ser comprendidas de manera típica o simbólica, y si es así, ¿cómo exactamente? Y finalmente, ¿será posible que estas siete cartas, como muchas otras partes de la Escritura profética, puedan tener interpretaciones y aplicaciones duales, o más que eso, múltiples?

Comprendo que para la mayoría, las iglesias a las cuales se dirigen estas cartas han sido tomadas como una representación de la Iglesia Histórica, a través de los tiempos desde el siglo I (Efeso) hasta el regreso de Cristo (Filadelfia y Laodicea). Este artículo no está destinado en manera alguna a refutar tal argumento. Sin embargo, pienso que estas cartas conllevan en sí mismas más de una explicación.

Dado que el escenario es el tiempo del fin y la profecía es futurista en su cumplimiento, ésta solo admite pensar que el mensaje a cada una de las siete iglesias podría ser simbólico, no solo en cuanto a la Iglesia Histórica sino más importante aún, para la Iglesia del tiempo del fin. Creo que esto puede ser así, y de ser lo correcto, las siete cartas tomarían un mayor y especial significado para el pueblo de Dios, hoy.

El Mesías, hablando en primera persona comienza diciendo: "Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último" (Apocalipsis 1:11). Juan se torna hacia Él, que está de pie en medio de siete candeleros, con siete estrellas a su diestra. La interpretación de estos símbolos la encontramos en el versículo 20:

"El misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra, y de los siete candeleros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias, y los siete candeleros que has visto, son las siete iglesias."

Para mí es muy claro que Cristo nos está diciendo que este importante libro fue escrito sobre hechos que acontecerán y afectarán al mundo al final de los tiempos, y eso es sobre lo cual la Iglesia de Dios del tiempo del fin debe ser profundamente instruida: el contenido de esta prolija profecía. En otras palabras, cuando Juan comienza en el capítulo 2 puede estar dirigiéndose no en primer término a las antiguas congregaciones en estas siete ciudades ni tampoco a la Iglesia Histórica, sino a la Iglesia de Dios que estaría extinguiéndose cuando estos grandes eventos del fin comienzan a desarrollarse en el escenario mundial.

Estoy consciente de que existe un cierto número de posibles explicaciones acerca de estas cartas, y no necesariamente me opongo a alguna de ellas. No hay problema en absoluto en admitir otras posibles interpretaciones porque a menudo esta es la manera en que la palabra de Dios está escrita y destinada a ser analizada. Sin embargo, quisiera examinar estas cartas desde la perspectiva del tiempo del fin. Podemos avanzar mucho mirando hacia las condiciones y problemas que Dios ha previsto que enfrentaría la Iglesia del tiempo del fin. De hecho, me parece que tomar estas siete iglesias como representación de la Iglesia de Dios del tiempo del fin armoniza más con el tema y el escenario del tiempo tal como se describe a través de todo el libro de Apocalipsis. Así, pues, sin más preámbulos, he aquí un breve resumen de los puntos más importantes destacados en cada carta:

EFESO: Esta iglesia dejó su PRIMER AMOR, que fue la gran debilidad que afectó a sus miembros. Sin embargo, tiene el crédito de negarse a seguir a aquellos que se proclamaban apóstoles y probó que eran mentirosos y falsos profetas. También rechazó las acciones perversas de los nicolaítas sobre quienes hablaremos más adelante en la carta a la Iglesia de Pérgamo.

ESMIRNA: Es de notar que este grupo en particular no recibió corrección directa de Cristo. Hizo buenas obras. Fue pobre, perseguida por quienes se declaraban ser judíos pero que en realidad no lo eran. Satanás estuvo muy activo llevando a algunos de sus miembros a la prisión. Esta iglesia fue predestinada a ser probada duramente y a sufrir tribulación por diez días.

PERGAMO: La iglesia de Pérgamo se constituyó en la sede de Satanás. Sufrió persecución e incluso martirio, pero los dos problemas principales de esta congregación fueron la doctrina engañosa y opresiva de los NICOLAÍTAS y la doctrina de BALAAM.

TIATIRA: Esta iglesia hizo buenas obras – amor, fe y paciencia. Sus últimas obras superaron las primeras y así esta iglesia trascendió espiritualmente. Pero hubo problemas graves en Tiatira con Jezabel. Esta falsa profetiza fue seduciendo a la iglesia y corrompiéndola, llevando a muchos miembros a cometer fornicación.

SARDIS: He aquí una iglesia con grandes defectos; de hecho, tenía un nombre pero no poder espiritual real – ¡posiblemente estaba muy próxima a la muerte! Sus miembros no estaban atentos y diligentes y en consecuencia, muchas de las buenas cosas del pasado se fueron corroyendo y destruyendo.

FILADELFIA: Esta es una buena iglesia, absolutamente con nada que criticarle. Había sido fuerte y no había negado el Nombre de Cristo. Había sufrido a manos de la SINAGOGA DE SATANÁS. No fueron muy poderosos pero eran pacientes y llenos de fe. Como resultado, recibieron la promesa de protección durante el tiempo de prueba y tribulación que habría de venir. Fue la única congregación que recibió promesa especial de protección.

LAODICEA: Finalmente en el último lugar de la línea – quizás, la peor iglesia de todas: TIBIA Y ORGULLOSA, vana y espiritualmente ciega. Se mantuvo en gran peligro de ser rechazada por Cristo y necesitó ser probada y depurada para lograr la purificación y el fortalecimiento.

Estas pequeñas siete congregaciones del siglo I en la antigua ruta de correo de Roma abren un camino en Asia Menor mucho más real de lo que su relativa oscuridad parecería indicar.

El Mesías hizo que Juan dirigiera específicamente el gran final de toda la Escritura a estas iglesias – porque ellas serían como prototipos de la Iglesia como un todo – históricamente – y más especialmente, la Iglesia de Dios del tiempo del fin, ¡la Iglesia de Dios de HOY!

Pienso que si permitimos que estas cartas nos hablen podemos conocer hechos cruciales que nos ofrecen profundas lecciones respecto a la Iglesia de los últimos días. Estas cartas revelan los principales problemas espirituales y las tendencias de la Iglesia del tiempo del fin, como también otros aspectos importantes que son aplicables a la situación de cada miembro.

A través de la lectura de Apocalipsis 2 y 3 se nos muestra un patrón de problemas que Cristo predijo que la Iglesia del tiempo del fin enfrentaría. Por favor, cuando escudriñe cada parte de este análisis no considere que se trata de un mero tipo de ejercicio intelectual, tal vez interesante pero nada fuera de lo común. Nadie debe cometer el error del cual muchos en la Iglesia de Dios hoy son culpables: no hacer caso de las advertencias y correcciones para sí mismos, sino aplicándolas a los demás. Estas debilidades son, de hecho, dos de las principales características de la actual Iglesia, especialmente la falta de celo y empeño sinceros, la renuencia a ser sacudido y conducido al arrepentimiento, a la acción, al compromiso total, e involucramiento decidido – algo lamentable y trágico. Las cartas a las siete iglesias detallan los problemas que nosotros, usted y yo, enfrentamos en este preciso momento; de hecho, los hemos vivido por mucho tiempo ya.

Si bien esta información fue dada hace ya casi 2000 años, es absolutamente vital e invaluable, por eso tome este estudio con gran seriedad y responsabilidad, por favor.

Las iglesias de Efeso, Sardis y Laodicea cometieron este doloroso pecado. ¿Qué significa realmente olvidar el primer amor? ¿Es acaso uno de los signos representativos de la Iglesia del tiempo del fin? ¿Lo reconocemos en medio de nosotros?

Es curioso el hecho de que Cristo escogiera la expresión "primer amor" pues ello tiene una connotación particularmente humana – amor entre hombre y mujer. Cuando dos personas están enamoradas, ¿en qué momento de la relación el amor está en su punto más apasionante y de más auto-sacrificio? ¿No es obvia la respuesta? Casi siempre, al comienzo. De hecho, muchas parejas han querido, de alguna manera, restaurar ese momento mágico: cuando se conocieron y enamoraron locamente. Bueno, créalo o no, el mismo principio se aplica al Espíritu.

Cuando una persona es llamada por Dios y llevada al arrepentimiento y al bautismo, se siente extasiada y cautivada por la exaltación que le produce la palabra de Dios; se conforta en la verdad y la oportunidad de conocer otros hermanos que comparten su creencia.

¿Recuerda el pasado, cuando su amor espiritual era ardiente y apasionado? ¿Recuerda cuando usted haría virtualmente, lo que fuera por agradar a Dios, por eliminar todos los obstáculos para servir y no permitir que barrera alguna lo detuviera? Yo personalmente, lo recuerdo. En aquellos días encontrábamos el tiempo para estudiar la Escritura diligentemente, y estábamos ansiosos por descubrir nuevas gemas de verdad espiritual. Cuando orábamos, lo hacíamos tan ferviente y frecuentemente, tanto que entonces Dios nos escuchaba y respondía. Quizá nuestra dedicación era tan sólo un momento de fiebre. Nuestro sentimiento de fraternidad con el pueblo de Dios era insaciable, ¡nada era suficiente! Probablemente nuestro nivel de compromiso era muy fuerte.

¡Qué hermosos días! Era el esplendor de nuestro primer amor espiritual, de muy gratas experiencias espirituales. Eran días de sentimientos de intimidad y cercanía, dedicación y urgencia que se traducen en obras. ¡Y eso es precisamente lo que Dios quiere de cada uno de Sus Hijos hoy!

El problema de cansancio y letargo; la pérdida de interés y energía; tomar a Dios, su verdad y su Iglesia a la ligera, dejar que las cosas preciadas se desvanezcan gradualmente, es la primera y quizás la principal y letal característica de la Iglesia de Dios de los últimos días. Precisamente por eso, Cristo lo mencionó a la Iglesia de Efeso, en primera instancia en Apocalipsis 2:4: "Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor."

En su carta a los hebreos, Pablo les recuerda a los hermanos de su tiempo sus primeros amores y celo, diciendo:

"Pero traed a la memoria los días pasados, en los cuales, después de haber sido iluminados, sostuvisteis gran combate de padecimientos; por una parte, ciertamente, con vituperios y tribulaciones fuisteis hechos espectáculo; por otra, llegasteis a ser compañeros de los que estaban en una situación semejante. Porque de los presos también os compadecisteis, y el despojo de vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo que tenéis en vosotros una mejor y perdurable herencia en los cielos. No perdáis pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Porque aún un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará. Mas el justo vivirá por fe; y si retrocediere, no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma" (Hebreos 10: 32-39).

¿Le suena familiar? Debería ser así, pues hubo un tiempo en el que muchos, sino todos nosotros, habríamos dado nuestras vidas en busca de Cristo, pues grande era nuestra fe y entusiasmo; y tan ferviente era nuestro celo que con gusto habríamos soportado cualquier cosa, habríamos sufrido la pérdida de todo por la gloria de Dios. Pero de alguna manera esas cosas tienden a desaparecer, ¿no es cierto? Tan pronto como nos habituamos a la rutina de la vida en la Iglesia comenzamos a caer en hábitos carnales de vida y muy pronto esa rutina nos adormece, el fuego se apaga y nuestra relación con Dios comienza a enfriarse. Pablo nos exhorta a recordar y REVIVIR el primer amor.

Podemos aprender tanto estudiando el Antiguo Testamento, especialmente el clásico ejemplo de la antigua Israel. Debemos recordar que el Señor Yahweh del Antiguo Testamento estaba casado con la nación de Israel, pero algo sucedió. ¡Su bella desposada OLVIDÓ SU PRIMER AMOR! En una profunda muestra de ese doloroso olvido Dios dice:

"Y yo pasé junto a ti, y te vi sucia en tus sangres [inmundicias, pecados], y cuando estabas en tus sangres te dije: ¡Vive! Sí, te dije, cuando estabas en tus sangres: ¡Vive! ...Y pasé yo otra vez junto a ti, y te miré, y he aquí que tu tiempo era tiempo de amores; y extendí mi mano sobre ti, y cubrí tu desnudez; y te di juramento y entré en pacto contigo, dice Jehová el Señor, y fuiste mía. Te lavé con agua [Espíritu Santo] y lavé tus sangres de encima de ti y te ungí con aceite; y te vestí de bordado, te calcé de tejón, [paz] te ceñí de lino [rectitud] y te cubrí de seda. Te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus brazos y collar a tu cuello [seguridad, confianza]... Pero CONFIASTE EN TU HERMOSURA, y te prostituiste [espiritualmente] a causa de tu renombre... NO TE HAS ACORDADO DE LOS DÍAS DE TU JUVENTUD [primer amor]... Por tanto, he aquí que yo extendí contra ti mi mano" (Ezequiel 16:6-27).

¿Qué causó que Israel olvidara su primer amor? Dios le dio un esplendoroso comienzo. Él era un esposo perfecto. ¿Qué sucedió? La respuesta es simple, y tiene que ver directamente con nuestra relación espiritual. Israel comenzó a tomar su belleza, las bendiciones, y su posición y llamado especial como algo que se había ganado con su propio esfuerzo, como algo que automáticamente le pertenecía. Tan pronto este sutil cambio ocurrió, las cosas preciosas de Dios empezaron a perder su lustre. Israel comenzó a confiar más en sí misma que en Dios, y eso la llevó a convertirse en amiga y luego paulatinamente, en amante del mundo en torno a ella – y en consecuencia, el fuego de aquel amor por Dios se extinguió. Fue muy gradual. Quizá Israel nunca se percató de este deterioro. Creyó que estaba acatando a su marido – pero no era así.

Hermanos, ¿ven ustedes el paralelo claro y real con la Israel espiritual de hoy? Cuando Cristo escribió a la Iglesia de los efesios que habían abandonado el primer amor, Él mismo recordó los amargos días de antaño cuando la Israel física se enamoró de extraños y su Esposo se vió obligado a divorciarse de ella. Y el Eterno está insistiendo en que esa misma situación no debe continuar en la Iglesia, ¡especialmente la Iglesia de Dios de hoy!

El Eterno desea ansiosamente que Su pueblo hoy, vea cuánto se ha alejado de Él; y también ansiosamente desea que Su pueblo, Su Iglesia se vuelva a Él con profundo arrepentimiento y fervor. La actitud que falta en muchos en la iglesia de hoy es aquella a la cual se refiere el Rey David cuando escribió:

"Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía. Mi alma tiene SED de Dios, del Dios vivo" (Salmos 42:1-2).

Debemos buscar a Dios como un hombre moribundo en el desierto busca el agua. Si no lo hacemos seguramente pereceremos. Debemos DESEAR a nuestro Dios y Sus caminos, Su pensamiento, Su justicia. Debemos preguntarnos muy seriamente, ¿qué tanto DESEAMOS verdaderamente ser como Dios? El profeta Isaías escribió:

"También en el camino de tus juicios, oh Jehová, te hemos esperado; tu nombre y tu memoria son el deseo de nuestra alma. Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte... Jehová Dios nuestro, otros señores fuera de ti se han enseñoreado de nosotros, pero en ti solamente nos acordaremos de tu nombre" (Isaías 26:8-9, 13).

El Eterno está llamando a Su pueblo escogido hoy – llamándolo para que regrese al calor, ¡a encender de nuevo aquel primer amor espiritual con Él! Él quiere celo, arrepentimiento, y completa y total sumisión y dedicación de nuestras vidas a Él y a Su obra que Él está realizando con nosotros! Una vez más David expresa claramente lo que Dios quiere profundamente de cada uno de nosotros ahora:

"Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te he mirado en el santuario. Porque mejor es tu misericordia que la vida; mis labios te alabarán. Así te bendeciré en mi vida; en tu nombre alzaré mis manos. Como de meollo y de grosura será saciada mi alma, y con labios de júbilo te alabará mi boca, cuando me acuerde de ti en mi lecho, cuando medite en ti en las vigilias de la noche. Porque has sido mi socorro, y así en la sombra de tus alas me regocijaré. Está mi alma apegada a ti; tu diestra me ha sostenido" (Salmos 63:1-8).

Invito a todos los que se consideran miembros de la verdadera Iglesia de Dios a analizar seriamente su relación personal con el Bendito y Amoroso Padre Celestial, y preguntarse, ¿es real? ¿es genuina? ¿Es íntima y cercana como la de una joven esposa y su esposo? ¿Está creciendo y siendo bien nutrida? ¿Está dando fruto espiritual realmente? ¿Es agradable a Dios? Vaya ante el Creador y examínese. Haga lo mismo que David: busque dentro de sí y póngase a prueba. No abdique antes de encontrar las respuestas a todas las preguntas. Usted necesita saber dónde se halla en su relación con Dios. Mucha gente confunde su conexión con alguna organización religiosa, con una real y poderosa filiación a Dios el Padre. Pero lo cierto es que si no tenemos un fuerte sentido de dónde estamos a los ojos de Dios, comenzaremos gradualmente a deslizarnos cuesta abajo y antes de que lo notemos estaremos en serios problemas espirituales.

No cometamos el error de la antigua Israel o de las iglesias de Efeso y Sardis, de desviarse de lo que debe ser una relación especial con Dios y Su Hijo. AHORA es el momento de evaluar su posición, su lugar ante el Supremo y Eterno Creador, y hacer algo realmente positivo. Por favor, piense en el importante y amoroso llamado que Cristo hizo a la Iglesia en esa primera carta – "no dejes tu primer amor."

En la carta de Pérgamo, el Mesías habló de algo llamado "la doctrina de Balaam." En Apocalipsis 2:14, leemos:

"Pero tengo unas pocas cosas contra ti, que tienes ahí a los que retienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación."

Una de las enigmáticas figuras de toda la Escritura es Balaam. La narración está en los capítulos 22 al 24 del libro de Números. Si bien el episodio es muy interesante y bien vale la pena estudiarlo en todos sus detalles, solo resumiré aquí los eventos y me centraré en las implicaciones espirituales.

Balaam era un adivino pagano, madianita, contratado por Balac, rey de Moab para maldecir a Israel luego de su gran éxito militar contra los amonitas. La fama de Balaam creció y se le subió a la cabeza. Se tornó orgulloso y codicioso. Balaam intentó maldecir a Israel tres veces, pero Dios no lo permitió y lo llevó a pronunciar sólo bendiciones hasta dar a conocer la profecía Mesiánica por medio de él (Números 24:17). Moisés acusó a Balaam de enseñar al Rey Balac a corromper al pueblo de Israel. Puesto que no logró maldecirlos, Balaam intentó llevar a Israel a fornicar con mujeres moabitas (Números 31: 15-16). El vidente fue muerto en la batalla cuando se unió al bando de la causa perdida de los madianitas.

¿Qué es exactamente "el camino de Balaam" o "la doctrina de Balaam," a la cual se refiere el Nuevo Testamento? En II Pedro 2:15 leemos: "Han dejado el camino recto, y se han extraviado siguiendo el camino de Balaam hijo de Beor, el cual amó el premio de la maldad."

No es difícil imaginar lo que es el "camino de Balaam" si damos una mirada al contexto de II Pedro 2:15 citado arriba, y que es la conclusión de un discurso que Pedro comenzó diciendo:

"Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como HABRÁ ENTRE VOSOTROS [la Iglesia] FALSOS MAESTROS, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aún negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina. Y MUCHOS seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado, y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme" (II Pedro 2:1-3).

En el versículo 3 Pedro usa una expresión bien clara que nos facilita identificar "el camino de Balaam." Él dice: "por avaricia harán mercadería de vosotros." O más claramente: "Estos maestros en su avaricia harían cualquier cosa para conseguir dinero."

Está profetizado que estos falsos maestros y líderes de la verdadera Iglesia estarían presentes ¡en la IGLESIA DEL TIEMPO DEL FIN! El versículo 2 señala que muchos serán conducidos al extravío por sus "caminos perniciosos." Esta palabra podría ser tomada mas bien como "lascivos," tal como se lee en muchos manuscritos. La palabra "lascivo" significa "sucio y perverso" y tiene una fuerte connotación de libertinaje sexual, lo que sin duda causaría blasfemia al camino de la verdad.

En otras palabras, la prédica del Evangelio sufrirá menoscabo a los ojos de extraños e incrédulos por la iniquidad de estos falsos maestros.

¿Se dan cuenta de las implicaciones sobre el fin de los tiempos que muestra este pasaje? ¿Conocen ustedes a algunos entre los líderes del pueblo de Dios que son culpables de tales graves pecados? Yo los conozco y me imagino que ustedes también. Más aún, el solo mencionar sus nombres puede poner la verdad divina inmediatamente en tela de juicio a los ojos de muchos. ¡El Todopoderoso Dios detesta tales pecados y no los tolerará por mucho tiempo!

Estos falsos líderes sobre quienes Pedro escribe son los mismos que han cometido el "error de Balaam." Ellos han sido y son hoy día codiciosos – han deseado la fácil y confortable vida que el dinero puede brindar y por ello se han convertido en el típico MERCENARIO asalariado, comercializando el regalo de Dios – predicando por dinero, poder e influencia y propósitos egoístas. Ellos nunca tienen suficiente. Su apetito es insaciable. Realmente Cristo estaba en lo correcto cuando dijo:

"Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas [¿cúantos pastores hoy harían eso?]. Mas el ASALARIADO, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa. Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas" (Juan 10:11-13).

Judas, el hermano de Cristo y uno de los primeros apóstoles, también caracterizó estos falsos líderes diciendo:

"Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos. Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios [comprometiendo la verdad enseñando no hay que obedecer la ley, etc.]... ¡Ay de ellos! Porque han seguido el camino de Caín, y se lanzaron por lucro en el error de Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré" (Judas 3-4,11).

Estos hombres son aquellos que siguen el principio mencionado por Pablo en su primera carta a Timoteo:

¿Conoce usted a líderes de la Iglesia que buscan su dinero, estudian las cifras estadísticas – qué tan bajos están los ingresos – y miden y aprovechan los porcentajes de crecimiento como criterio para medir su éxito? ¿Conoce a líderes de la Iglesia que han abandonado el tan espiritualmente valioso y retador camino de Cristo, Pedro y Pablo para entregarse a los intereses del poder y el dinero? ¿Conoce a algunos que aún hoy, en lo último del juego, ambicionan sus imperios, sus proyectos sobre grandes edificios, su antiguo y cómodo estilo de vida, cuando la enseñanza, la predicación de la VERDAD está perdiendo fuerza e importancia? ¡PIENSE EN ELLO!

La doctrina de Balaam sedujo a los antiguos israelitas induciéndolos a la fornicación y a mezclarse con los gentiles, a abandonar el llamado divino y un carácter peregrino a favor de la conformidad con el mundo. Cometer fornicación espiritual es fusionar las ideas y prácticas del paganismo o del mundo carnal con la verdad de Dios. La Iglesia del tiempo del fin ha comprometido y debilitado la palabra de Dios con su liderazgo corrupto llevando a sus miembros a caer en el error y el pecado.

Hoy "el camino de Balaam" está siendo recorrido por muchos al aceptar las doctrinas de la Trinidad en la Iglesia de Dios, asemejando la iglesia a un reino, permitiendo matrimonios fuera de la fe, aceptando el concepto mundano de la fe sin obras, negando la realidad de la verdadera identidad de Israel, aprobando el divorcio prácticamente por cualquier razón (aún apoyando a algunos para que se separen de su cónyuge), negando el poder salvador de Cristo y mintiendo descaradamente en público sobre el pasado de la Iglesia apoyándose en varias publicaciones – todo esto en un intento por conquistar el favor de las comunidades tanto seculares como religiosas del mundo. El Todopoderoso Dios condena esta reincidencia en la fornicación espiritual, diciendo:

"Entre tanto mi pueblo está adherido a la rebelión contra mí; aunque me llaman el Altísimo, ninguno absolutamente me quiere enaltecer." "Vuélvete, oh rebelde ISRAEL [Iglesia], dice Jehová; no haré caer mi ira sobre ti, porque misericordioso soy yo, dice Jehová, no guardaré para siempre el enojo" (Oseas 11:7 Jeremías 3:12) .

Para concluir esta parte de nuestro estudio, les diré que uno de los pecados más graves de la Iglesia del tiempo del fin puede ser algo que no viene a la mente fácilmente, y es la laxitud con la que el Santo sábado es guardado, y el rechazo cobarde de los líderes de la Iglesia (muchos de los cuales también quebrantan el sábado) a corregir los problemas. Muchos hermanos están trabajando abiertamente en el Día santo del Señor, algo que simplemente nunca se habría tolerado hace algunos años. Son tan importantes las cosas temporales de este mundo para algunos que deshonran a su Creador y escupen en su cara quebrantando notoriamente el único día que Él santificó y del cual tenemos orden absoluta de descansar de todas nuestras labores. Así pues, sugiero a todos los que son culpables de tal pecado, dar una minuciosa y larga mirada a lo que su labor les ha proporcionado – toda posesión, toda comodidad, toda "cosa sencilla" y sin desafíos en la calle fácil, y decirse a sí mismos: ¡YA TENEMOS NUESTRA RECOMPENSA, AQUÍ Y AHORA! Recuerde que quienes persisten en trabajar por la carne que perece están destinados a sufrir la pérdida de todo, incluso, si no son cuidadosos, su propia salvación eterna.

Hermanos, debemos ser puros delante de Dios. Dejen de trabajar en el día sábado. Atiendan sus negocios durante la semana. Prepárense para el sábado, no importa cuanto les tome. Crean en Dios de todas maneras y hagan los cambios que tengan que hacer en sus vidas. Si es necesario perder o cambiar sus empleos para obedecer a Dios, háganlo. Háganlo alabándolo a Él en todo momento. ¡Yo mismo he estado en esa situación! ¿Quién es nuestro Dios? ¿Qué tan fuerte es? ¿Qué tan perfecto? Él lo cuidará, pero ¡ACTÚE! Siga sentado en el muro del despeñadero y seguramente caerá. El final de esta era humana está cerca y el momento de tomar seriamente nuestro llamado es ¡AHORA! Además de trabajar en el día del sábado, también se realizan actividades para el provecho personal. Muchos continúan comprando y vendiendo en los días sábado en franca violación a la Escritura (Nehemías 10:29-31; 13:15-21). No permitan que los ministros débiles de voluntad les digan lo que ustedes pueden o no hacer. Vayan de rodillas delante de Dios, abran sus Biblias y dejen que el Espíritu Santo llene sus mentes de la verdad. Usted debe tomar sus propias decisiones. No permita que otros las tomen por usted. Eso es lo que muchos líderes de la Iglesia desean hacer. "Sólo súbase al bus y deje todo lo demás a los expertos," parece ser su lema.

Bien, hermanos, ¡NECESITAMOS VOLVERNOS EXPERTOS! Dios no se complace con los débiles de carácter, ni con mentes liberales, ni tampoco quiere las mediocres opiniones y actitudes de Su pueblo, especialmente de aquellos que están en lugares de responsabilidad de servir. Él desprecia la ceguera y arrogancia, no importa las "virtudes" que algunos aparenten tener. La doctrina de Balaam está viva y harto activa en la Iglesia de Dios hoy, tal como Cristo fielmente predijo que sucedería. De hecho, es uno de los mayores problemas que el pueblo de Dios enfrenta hoy. Estuve por años en ciertas organizaciones de la supuesta iglesia y pude ver cómo los líderes vivían como reyes de esta tierra, despilfarrando para sí mismos cosas que usted y yo apenas podemos imaginar. Estuve allí cuando ciertos líderes de la Iglesia cometían horribles indecencias sexuales que fueron convenientemente ocultadas bajo el tapete por años y mantenidos fuera de la vista y la verdad una y otra vez.

Tomar las cartas a las siete iglesias desde la perspectiva de la Iglesia de los últimos días puede ayudarnos a ver más claramente cómo Cristo ha delineado precisa y cuidadosamente muchos de los principales pecados y debilidades de la Iglesia de hoy. Esto debe ayudarnos a enfocar más directamente los problemas y a aplicar las Escrituras a nosotros mismos. Debemos recordar que el juicio está sobre la casa de Dios, Su Iglesia, en este momento (I Pedro 4:17).

El origen e importancia de los nicolaítas es muy oscuro. Nuestra investigación muestra tan solo detalles incompletos de la realidad. ¿Fueron una secta antigua en Asia Menor, seguidores de alguna forma no convencional del cristianismo? Parece haber alguna evidencia que sugiere que esto es así, pero no podemos confirmarlo con seguridad. Clemente de Alejandría establece que hubo un grupo que proclamó al diácono Nicolás, prosélito de Antioquía (Hechos 6:5), como su fundador, pero esto no está claramente demostrado y aún si fuera cierto, no nos dice absolutamente nada sobre este grupo o su doctrina. Entonces, ¿cómo entendemos esta referencia a los nicolaítas?

Una posible explicación es que la palabra "nicolaíta" puede ser un nombre secreto y no el nombre de un grupo o secta en particular. En otras palabras, puede ser un símbolo. Es posible que "nicolaíta" sea el resultado de alguna figuración etimológica de una palabra específica – y esa palabra es, ¡el nombre de Balaam! Como ustedes saben Balaam significa “señor del pueblo.” De acuerdo con el Talmud y el historiador y filósofo judío del siglo I, Filón, la variante griega de Balaam era NIKA LAON (el que conquistó al pueblo). Tal juego de palabras no fue en absoluto desconocido durante aquel tiempo, por tanto, esta explicación no debe ser omitida de ningún modo. De hecho, encaja perfectamente con los problemas espirituales que enfrenta la Iglesia del tiempo del fin.

Si todo esto es correcto, el término "nicolaíta" podría referirse muy posiblemente al problema de los superiores y los líderes que se enseñorean del rebaño y contra los cuales tanto el Salvador (Mateo 20:25, 28) como el apóstol Pedro (I Pedro 5:2-3) exhortaron fuertemente. Tal vez esta es la razón por la cual las "obras de los nicolaítas" son mencionadas en la carta a los efesios (Apocalipsis 2:6), y pueden tener relación con aquellos que proclamaban ser apóstoles, pero de los cuales se comprobó que eran mentirosos (Apocalipsis 2:2).

Los problemas de la excesiva autoridad ministerial, el control y aún absoluto dominio sobre los miembros, ha sido uno de los permanentes y grandes males en la Iglesia de Dios del tiempo moderno. En algunos casos se ha convertido en una fuerte opresión, en una dictadura con vara de hierro. En otros casos, ha prevalecido otra forma más sutil de control y dominio mental. No importa de qué manera se quiera ver la situación, el problema ha sido y continúa siendo real y doloroso para muchos dentro del pueblo de Dios. El Amoroso Padre Celestial inspiró a Jeremías para profetizar contra esta condición en la Iglesia:

"Porque fueron hallados en mi pueblo impíos; acechaban como quien pone lazos, pusieron trampa para CAZAR HOMBRES. Como jaula llena de pájaros así están sus casas llenas de engaño; así se hicieron GRANDES Y RICOS. Se engordaron y se pusieron lustrosos, y sobrepasaron los hechos del malo; no juzgaron la causa, la causa del huérfano; con todo, se hicieron prósperos y la causa de los pobres no juzgaron... Cosa espantosa y fea es hecha en la tierra; LOS PROFETAS PROFETIZARON MENTIRA, Y LOS SACERDOTES DIRIGÍAN POR MANOS DE ELLOS; y MI PUEBLO ASI LO QUISO. ¿Qué, pues, haréis cuando llegue el fin?" (Jeremías 5:26-31).

¡Qué sentencia tan condenatoria de parte del Eterno Dios! El ansia de los líderes por mantener el control de la Iglesia ha sido la fuente de muchos problemas graves y muy perturbadores para todo el Cuerpo. Ha sido quizás, el único asunto que ha causado más división entre los miembros de la Iglesia a través de los años. En ocasiones, algunos ministros han sacado gran cantidad de personas fuera de la Iglesia de Dios (así lo creen ellos) de manera cruel e inmoral; han causado en muchos una actitud de rebeldía. El profeta Jeremías habla una vez más acerca de estos pecados de la Iglesia en los postreros días. Tome nota de cuán aplicables son a nuestra experiencia.

"¡Ay de los pastores que destruyen y dispersan las ovejas de mi rebaño! Dice Jehová. Por tanto, así ha dicho Jehová Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros dispersasteis mis ovejas, y las espantasteis, y no las habéis cuidado. He aquí que yo castigo la maldad de vuestras obras, dice Jehová... No se apartará el furor de Jehová hasta que lo haya hecho, y hasta que haya cumplido los pensamientos de su corazón; EN LOS POSTREROS DIAS LO ENTENDERÉIS CUMPLIDAMENTE" (Jeremías 23:1-2,20).

El profeta Ezequiel va aún más allá en su denuncia sobre los líderes de la Iglesia del tiempo del fin:

"Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y dí a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se APACIENTAN A SI MISMOS! ¿No apacientan los pastores a los rebaños? COMEIS LA GROSURA, Y OS VESTIS DE LA LANA; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas. No fortalecisteis a las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, ni volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis ENSEÑOREADO DE ELLAS CON DUREZA Y CON VIOLENCIA. Y andan errantes por falta de pastor, y son presa de todas las fieras del campo, y se han dispersado. Anduvieron perdidas mis ovejas por todos los montes, y en todo collado alto; y en toda la faz de la tierra fueron esparcidas mis ovejas, y no hubo quien las buscase, ni quien preguntase por ellas" (Ezequiel 34:2-6).

Otra posible conexión a lo largo de este análisis es el hecho de que la ciudad de Pérgamo, donde el efecto de los nicolaítas se sintió más intensamente, fue también la sede de Satanás (Apocalipsis 2:13). Esto probablemente se relaciona con el fuerte énfasis dado a la adoración de la deidad pagana Zeus, para la cual se había construido un magnifico templo a las afueras de la ciudad.

Ahora bien, esta información por sí misma no puede decirnos mucho, pero hay más. Usted notará que la tercera epístola de Juan está dirigida a un hombre llamado Gayo, pero no se menciona el nombre de la ciudad. Puesto que Juan estuvo liderando la Iglesia en Asia a finales del siglo primero y estableció su hogar en Efeso, seguramente escribió las cartas a las mismas Iglesias mencionadas en Apocalipsis 2 y 3. Me pregunto si, de hecho, la tercera carta de Juan pudo haber sido escrita a la Iglesia de Pérgamo, porque nosotros encontramos este hombre llamado Diótrefes quien, en todos los sentidos, se oponía al apóstol mismo y aun excomulgaba creyentes verdaderos que no se sometieron a su dominio (III Juan 9, 10). En otras palabras, aquí tenemos quizás, el ejemplo más representativo de una posible actitud nicolaíta, indudablemente una típica situación enfrentada por los cristianos en Pérgamo.

Aparte de este posible nexo, el nombre Diótrefes es griego y significa "nutrido por zeus". Puesto que Pérgamo fue el centro para el culto de adoración a Zeus en toda Asia, constituyéndose así en la sede de Satanás, tal vez hay alguna buena razón para relacionar los dos asuntos.

Sea lo que fuere que los nicolaítas representen, nunca lo sabremos con exactitud. Parece ser, basándonos estrictamente en ciertos comentarios de algunos historiadores de la antigua Iglesia, que los nicolaítas pueden haber estado asociados con un movimiento antinómico (contra la ley) a la Iglesia. Si es así, esto podría ser coherente con la situación vigente en la cual varias leyes y principios de Dios han sido comprometidos, sacrificados y extensamente diluídos, y la Iglesia como un todo ha sido desviada de la guarda cuidadosa y diligente de los mandamientos de Dios.

Otro tipo de problemas espirituales graves, revelados en las cartas de Apocalipsis 2 y 3 es la tibieza y autojusticia, especialmente como se manifiesta en la carta a Laodicea. Esta iglesia era grande y poderosa. Dio gran importancia a la riqueza material y a las posesiones, y consideró la acumulación de este tipo de cosas como un parámetro para medir su buena posición ante Dios. El interés en las cosas físicas, en un estilo de vida fácil, causó en ellos el decaimiento espiritual. La tibieza, la laxitud y el adormecimiento espiritual fueron el resultado. Esto molestó de tal manera a Cristo que Él amonestó con vomitarla de su boca (Apocalipsis 3:16).

La descripción de la Iglesia de Laodicea (Apocalipsis 3:14-17) es el REFLEJO de la Iglesia del tiempo del fin. El sueño espiritual prolifera entre el pueblo de Dios hoy. La complacencia y la auto-justicia han tomado el lugar de la humildad, el celo y la dedicación. La mayoría de los miembros simplemente no han tenido el tipo de liderazgo espiritual necesario para que la Iglesia mantenga el ritmo de crecimiento espiritual y servicio. Muchas congregaciones han tenido a un dictador que se enseñorea del rebaño o a una persona débil de espíritu con quien casi nada funciona.

Un verdadero ministro, primera y principalmente es HUMILDE y totalmente sujeto a la misericordiosa mano de Dios. Está lleno de valor y firmeza cuando predica la verdad, y no compromete la palabra de Dios para complacer a otras personas, aún cuando sean sus superiores o personas del mundo. Es paciente y comprensivo, alentador de todos los miembros sin tener preferencias – en todo momento tiene en su corazón el más sano interés hacia ellos más no el suyo propio. No realiza su labor espiritual simplemente por dinero, tampoco busca o desea reconocimiento. No ejerce una misión de poder pero marca las pautas.

Está lleno de voluntad para animar y reunir a los miembros. Sobre todo, su llamado es real y genuino. Personalmente se halla cerca de Dios, mantiene una constante actitud de arrepentimiento, y cambia cuando se equivoca. No actúa como si lo supiera todo; está motivado por el amor divino en todo su servicio para la Iglesia. Hay ministros de este calibre en la Iglesia, pero no lo suficientemente comprometidos.

Las comodidades y bendiciones materiales en que nos centramos hoy día han hecho que casi todos nosotros nos hayamos debilitado espiritualmente. No todos estamos, o quizá, no podemos estar en una excelente condición física, pero todos deberíamos estar en excelente condición espiritual. El deseo por un estilo de vida más fácil, una vida menos complicada, menos desafiante y confrontacional se ha adherido al liderazgo de la Iglesia por años. Solo lo mejor que este mundo tiene para ofrecer ha sido suficiente para ellos. El ejemplo carnal que han dado es abominación ante el Misericordioso Dios, y ha contaminado a los miembros que lo han seguido ciega y complacientemente. La Iglesia se ha convertido por lo tanto, en una fiel copia de papel carbón, en un clón, en un espejo de sus líderes.

Su actitud, su filosofía, su estilo de vida han sido emulados y adaptados completamente por los hermanos. ¡Oh, qué lamentable situación en la que gran parte de la Iglesia de Dios está hoy!

¿Y el resultado? Una Iglesia que SE HA DORMIDO ESPIRITUALMENTE; una Iglesia que no se SACRIFICA realmente, que no se pone al servicio de los demás; una Iglesia que busca evitar cualquier cosa negativa, difícil, dura – comprometiendo la verdad para esquivar cualquier posible persecución o vergüenza; una Iglesia que no está creciendo espiritualmente – y cuyo conocimiento, entendimiento y sabiduría en la palabra se ha estancado virtualmente.

Dios no está agradado de su Iglesia hoy. Como Laodicea, la Iglesia hoy ha sido llevada a asumir que es espiritualmente rica y que está sirviendo y agradando a Dios. Como en Laodicea, gran parte de la Iglesia es opulenta, bruñida y satisfecha de sí misma – una magnífica CORPORACION muy observadora de las estadísticas y muy complacida espiritualmente. El profeta Amós habla fuertemente sobre estas cosas diciendo:

"¡Ay de los REPOSADOS EN SION [Iglesia] ... oh vosotros que dilatáis el día malo [enseñan que el fin no está cerca], y acercáis la silla de iniquidad [Hebreo "reino del terror," gobierno impío de la Iglesia]. Duermen en camas de marfil, y reposan sobre sus lechos; y comen los corderos del rebaño, y los novillos de en medio del engordadero; gorjean al son de la flauta...Beben vino en tazones y se ungen con los ungüentos más preciosos; Y NO SE AFLIGEN POR EL QUEBRANTAMIENTO DE JOSÉ [Israel física y espiritual]. Por tanto, ahora irán a la cabeza de los que van a cautividad y se acercará el duelo de los que se entregan a los placeres" (Amós 6:1-7).

Muchos en la actual Iglesia de Dios viven sus vidas, cada día, en la misma antigua rutina en la que siempre han vivido. Necesitamos ROMPER ESA RUTINA– QUEBRAR ESE MOLDE. Necesitamos un verdadero reavivamiento espiritual, es decir, revivir la dádiva del Espíritu Santo en nuestro ser. Tenemos que alcanzar un estado en el cual estemos ¡VIVOS, DESPIERTOS Y PREVENIDOS genuina y espiritualmente!

En tanto que toleremos cualquier estado de pereza espiritual, nuestra experiencia con Dios nunca será REAL como tiene que ser. Oh, sí, al igual que Job, hemos escuchado con el oir del oído. De hecho, hemos escuchado muchos sermones, leído muchos artículos, pero lo que necesitamos realmente es el descubrimiento que nos permita VER con nuestros ojos espirituales la verdadera inmensidad de nuestro gran llamado. El nivel de alerta espiritual en la Iglesia está peligrosamente bajo. En demasiados casos estamos muy cerca del mundo que nos rodea, y lamentablemente, a pesar del detrimento tanto individual como colectivo, muchos preferimos este camino. Se ha vuelto muy difícil para muchos en el pueblo de Dios discernir qué es lo erróneo en la Iglesia o en el mundo. Desafortunadamente muchas de nuestras actitudes y actividades favoritas, aún nuestras conversaciones están fuertemente influenciadas por el mundo en que vivimos. Muchos miembros de la Iglesia quieren disfrutar ambas cosas: lo mejor de lo que Dios ofrece y lo más fácil y placentero de lo que el mundo entrega. Deberíamos SALIR de ese sistema, pero en muchas ocasiones preferimos mantener un pie firmemente puesto en el mundo y continuar engañándonos a nosotros mismos con que en todo estamos muy bien con Dios.

Compare, si lo desea, el tiempo que pasa con su familia viendo televisión, en el cine, entreteniéndose con los amigos, jugando o también dedicándose a los deportes u otras actividades recreativas, participando en excursiones sociales, leyendo revistas o libros frívolos, malgastando el tiempo de mil maneras, pero no necesariamente estudiando la Biblia con diligencia y orando a Dios de corazón, con fervor y amor, o en un servicio activo en favor de los demás. Este es el instrumento adecuado para medir su vida espiritual. ¿Le gusta lo que ve? ¿Cómo lo compara con el ejemplo establecido por Cristo, Pablo o Pedro? ¿Está satisfecho de tener sus prioridades en el orden correcto? El contenido de su vida, ¿refleja realmente el hecho de que usted ha recibido el más especial y precioso de los llamados del Creador del universo? Pablo claramente nos enseña a EXAMINARNOS a nosotros mismos – asegurándonos de si estamos aún en la fe o no (II Corintios 13:5). ¿Está dispuesto a hacerlo – suplicando a Dios que toque su corazón y lo pruebe como David lo hizo? (Salmos 139:23-24.) Sea honesto consigo mismo y si siente que necesita hacer un cambio, recuerde que Dios está con usted y que Él se agrada cuando Su pueblo llega a este estado en su vida, y que Él estará ahí para ayudarlo en cada paso del camino. Ante todo, este tipo de análisis serio y genuino y el cambio resultante que trae, es un gran suceso; de esto se trata este llamado prioritariamente. No seremos de utilidad alguna para Dios si no estamos espiritualmente despiertos y vivos, sabiendo dónde estamos ante Él, y completamente inmersos en Su obra y voluntad. No quiero decir que todo el pueblo de Dios se halla en estado alarmante, pero tantos lo están que me siento impelido a hablar de una manera tan negativa y tan general. Quiera nuestro Bendito y Amoroso Padre Celestial ayudarnos a todos y cada uno de nosotros a despertar y probar dónde y cómo estamos ante Él y comenzar a hacer algo al respecto con la urgencia que se amerita.

En la iglesia de Tiatira existía un obstáculo enorme – la falsa profetiza Jezabel (Apocalipsis 2:20). Su nombre significa BAAL VIVE. ¿Qué tiene que ver la referencia a esta mujer infame con la Iglesia de Dios del tiempo del fin?

El ministerio de Elías es un tipo y un precursor de la obra de la Iglesia del tiempo del fin. De hecho, está predicho claramente que Elías vendrá antes del Gran y Terrible Día del Señor (Malaquías 4:5). En la antigüedad, en los días del profeta Elías, Jezabel era la inicua esposa del Rey Acab y quien enseñó a los hijos de Israel a servir a Baal. Ella tenía sus propios profetas y casta sacerdotal quien se encargaba del servicio del templo. Es notorio que era confesa enemiga de Elías, sirviente virtuosamente dedicado del Señor (ver I Reyes 17:1).

Así, Jezabel se convirtió en sinónimo de RELIGION FALSA en Israel. Ella corrompió al pueblo de Dios y su verdad. En Apocalipsis 2 esta misma mujer malvada es mencionada como un tipo de IGLESIA FALSA que estaría presente en la verdadera Iglesia en el tiempo del fin. Ella estuvo presente en la primitiva Iglesia apostólica y lo está también hoy día.

La presencia de esta seductora profetiza en la Iglesia de Tiatira es, creo yo, muy significativa para nosotros ahora. Démonos cuenta de que en el capítulo inicial del Apocalipsis, Cristo es visto de pie en medio de las siete Iglesias. Allí es donde Él debe estar siempre, hablando individual o colectivamente. Pero de las siete Iglesias mencionadas en Apocalipsis 2 y 3 la que está en el medio, la cuarta – la Iglesia de Tiatira – es el lugar exacto de ubicación de Jezabel o iglesia falsa. Creo que Cristo utilizó el simbolismo de esta falsa profetiza, ubicada en medio de las siete iglesias, para revelar a aquellos cuyos ojos están abiertos en el tiempo del fin, cuál sería el estado espiritual de Su Iglesia.

La Iglesia del tiempo del fin está siendo ENVENENADA DESDE ADENTRO. Pablo habló abiertamente de esta condición presente en la Iglesia en sus días, lo que era profecía para nuestro tiempo. Leemos la cita en II Tesalonicenses 2:3-8:

"Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá [regreso de Cristo] sin que antes venga la apostasía [apartarse de la verdad], y se manifieste el hombre de pecado [en la Iglesia y en el mundo], el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios [físico y espiritual] como Dios, haciéndose pasar por Dios. ¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía con vosotros, os decía esto? Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se manifieste [en la Iglesia del tiempo del fin]. PORQUE YA ESTÁ EN ACCIÓN el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida."

El misterio de iniquidad es una referencia directa al falso sistema que existía. Sí, aún en los días del apóstol Pablo comienza a surgir en la Iglesia verdadera. El apóstol alertó a los cristianos de ese tiempo, pero el significado de sus palabras era profético para el tiempo del fin, pues trata sobre los eventos que culminarían con el retorno del Mesías. Y ciertamente, como la aparición final del “hombre de pecado” en toda su fuerza es para los días finales de esta era, el pueblo de Dios es advertido de ello mediante la presencia de hombres inescrupulosos que, como en los días del apóstol Pablo, surgen en tiempos precisos como simbolismo de lo que será finalmente.

Hermanos, debemos ser muy cuidadosos. Tenemos que insistir en estar plenamente despiertos y prevenidos de lo que está sucediendo, ya sea eventos en el mundo o en la Iglesia misma. Satanás está trabajando en su más asertivo y sutil intento por apoderarse de la Iglesia desde el principio mismo.

Dios exhorta, ordena a su pueblo hoy despertar y SALIR del conformismo espiritual y del pecado. En los días de Jezabel, Israel fue seducida como Juan describe a la iglesia de Tiatira. En ese tiempo tan solo siete mil israelitas creyentes se mantuvieron firmes en la verdad de Dios. Solo siete mil israelitas fieles rechazaron doblar su rodilla ante Baal, aún cuando sus propias vidas estaban en gran peligro. Me pregunto, ¿cuánta gente del pueblo de Dios tendrá la capacidad de ver el alarmante paralelo entre la Israel física bajo el dominio de la original Jezabel y la Israel espiritual bajo la seductora influencia de la Jezabel moderna? Y más aún, ¿cuántos del pueblo de Dios tendrán el valor, la fortaleza, la visión, la fe y el amor de LEVANTARSE AHORA para ser contados sin importar las consecuencias – como hermanos, en estado de alerta, igual que en el pasado?

El apóstol Pablo hizo un comentario muy interesante sobre la época de Jezabel y Elías hablando con respecto de la salvación final de Israel:

"No ha desechado Dios a su pueblo, al cual desde antes conoció. ¿O no sabéis qué dice de Elías la Escritura, cómo invoca a Dios contra Israel, diciendo: Señor, a tus profetas han dado muerte, y tus altares han derribado; y sólo yo he quedado, y procuran matarme? Pero ¿qué le dice la divina respuesta? Me he reservado SIETE MIL hombres, que no han doblado la rodilla delante de Baal. Así también aún en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia" (Romanos 11:2-5).

Este es un pasaje muy revelador. Pablo está presentando una analogía muy clara entre la Israel en los días de Elías y la Israel de los tiempos del fin. Si tomamos esto para ser aplicado a la Iglesia, tanto en sentido espiritual, como también a la Israel física, podemos concluir que hay un mensaje oculto para los cristianos del tiempo del fin. ¿Habrá igualmente tan sólo un pequeño puñado de creyentes verdaderamente dedicados a la Iglesia de Dios de los últimos días, justo antes de la venida de Cristo? ¿Habrá una vez más tan solo siete mil que comprenderán la elección de Dios, quienes son los "llamados, escogidos, y fieles" (Apocalipsis 17:14)? ¿Serán tan solo siete mil los que se encuentran en estado de alerta, y quienes mantienen una actitud humilde y sencilla, y viven llenos de celo espiritual, dispuestos y comprometidos en la obra final de Dios en esta tierra?

Los paralelos y tipologías son muy determinantes y significativos para que se cumpla semejante propósito. Sugiero a todos leer el capítulo 11 de Romanos con la Iglesia del tiempo del fin en mente, pues creo que así, ustedes verán claramente que un pequeño remanente está reservado mientras el resto de la Iglesia es perseguida y sufre grandemente. Pero al final, como Pablo testifica, "todo Israel será salvo."

Es mi deseo sincero que cada uno de nosotros, incluyéndome yo, se apresure a reevaluar honestamente su vida espiritual. En este engañoso mundo de Satanás es tan fácil con cada sutil tentación, cada momento desperdiciado a nuestro alrededor, estar en el medio del camino o sentarse en la zona de la indecisión o simplemente deslizarse a través de la vida, asumiendo que estamos agradando a Dios todo el tiempo, que este es, ha sido, y siempre será el camino. Hermanos, ¡TENGAMOS CUIDADO! Esta es la filosofía y la actitud más peligrosa que cualquiera de nosotros pueda tener. Pedro previó dicha situación entre el pueblo de Dios para el tiempo del fin. Las mayores organizaciones de la Iglesia de Dios hoy día están comenzando a dar algún énfasis al regreso de Cristo a esta tierra. En un tiempo atrás, la Iglesia estuvo llena de mucho más celo y entusiasmo y era franca al respecto. Sin embargo, por estos días parece que varios grupos están mucho más satisfechos adquiriendo más y más, acomodándose mejor a esta vida, en el aquí y en el ahora, y no están ni animados ni mucho menos enterados sobre las cosas espirituales. Pedro escribió en su segunda carta la siguiente predicción para nuestros días. Atendamos a sus palabras:

"Sabiendo primero esto, QUE EN LOS POSTREROS DIAS vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias, y diciendo: ¿DÓNDE ESTÁ LA PROMESA DE SU ADVENIMIENTO? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación" (II Pedro 3:3-4).

Su entusiasmo personal por el retorno de Cristo, ¿decayó desde su primer acercamiento a la verdad de Cristo, o está más animado que nunca antes? ¿Qué tan REAL es para usted ese día que se acerca rápidamente? Pedro concluyó su disertación diciendo:

"Puesto que todas estas cosas [temporales y fisicas] han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, ESPERANDO Y APRESURÁNDONOS PARA LA VENIDA DEL DÍA DE DIOS!" (II Pedro 3:11-12).

¡Cuán peligroso, y hasta fatal, es para cualquiera de nosotros dejarse hipnotizar por la similitud de cada día que pasa y cada evento que sucede! Semejante filosofía nos prepara para una larga siesta. Todos conocemos la naturaleza cíclica de la vida, pero esto solo muestra que los seres humanos continuamos repitiendo los errores del pasado, rara vez aprendiendo las lecciones necesarias. Esta situación realmente tiene que constituir una seria alarma para nosotros en vez de ponernos a dormir.

Dios tiene un plan, el que está llevando a cabo desde el principio mismo, y AHORA es el momento para usted y para mí de hacer nuestra parte, pues Dios quiere que participemos con Él en la realización de ese Su plan. Los cristianos no podemos aceptar la monotonía de la vida. Si lo hacemos, recaeremos y lenta pero seguramente, comenzaremos a "bajar la guardia," y peor aún, a debilitar las duras realidades de las Escrituras. Esto con suma facilidad puede llevarnos a sentirnos bien sólo porque nos llevamos bien, y a hacerlo todo con un rostro sonriente, asumiendo que estamos muy bien. ¡Esto es un engaño total inspirado por el demonio!

Pablo dijo a los Romanos de sus días algo crucialmente importante para nosotros hoy:

"Y esto, conociendo el tiempo, que ES YA HORA de LEVANTARNOS DEL SUEÑO; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas y vistámonos las armas de la luz. Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne" (Romanos 13:11-14).

¡El Misericordioso Dios LLAMARÁ a un pueblo en el que pondrá Su grandioso Nombre en nuestros días! HABRÁ un remanente de gente de su Iglesia que estará despierto y atento, y que ATENDERÁ A SU LLAMADO. HABRÁ algunos que renunciarán a todas las cosas de la carne y seguirán con firmeza a su Dios, sirviéndole, sacrificándose, ESFORZÁNDOSE Y ACTUANDO (Daniel 11:32-33). Ahora la pregunta es, ¿USTED Y YO estaremos entre ese grupo especial, ELEGIDO POR DIOS?

Hermanos, no puedo suponer que hablo para ustedes o para alguien más, y no para mí mismo – por eso les digo: yo quiero darme completamente a mí mismo para Dios, sinceramente y sin reservas; quiero olvidar para siempre la búsqueda de las riquezas físicas, la gloria, el reconocimiento, el ego, los asuntos carnales, el poder, la influencia y el deseo por tener más y más en esta vida. Quiero detenerme y no descuidar la inmensidad de este llamado que he recibido misericordiosamente, y lograr los mejores términos en mi RELACIÓN REALMENTE GENUINA con Dios. Quiero ser una herramienta en la mano de mi Salvador – ser capaz y estar preparado para ser útil en la mejor y más eficiente manera posible; obedecer, honrar y complacer a mi Señor, y servir a Su pueblo con todo mi tiempo, energía y esfuerzo a través del poder del Espíritu Santo.

Solamente puedo desear y orar para que cada uno de ustedes, y de hecho, todo el pueblo verdadero de Dios piense de la misma manera. Vaya ante Dios en oración ahora mismo, lo conmino, y comience pidiéndole que trabaje en usted en este asunto tan importante. Todos los cristianos necesitamos recibir ¡un verdadero LLAMADO A LA ACCIÓN cristiana! ¡Estamos por convertirnos en el Ejército de Cristo – soldados cristianos, listos, en marcha hacia la batalla! Por lo tanto necesitamos ser de agrado a nuestro Creador, con una actitud de arrepentimiento constante, dejando de lado nuestra incesante búsqueda de las cosas físicas, carnales; y en armonía espiritual reunirnos en torno a nuestro gran estandarte – ¡YAHWEH-NISSI!

Los líderes de la actual iglesia organizada no lo llamarán a la acción. Ellos NO impulsarán al pueblo de Dios. Eso inclinaría su bote peligrosamente, ladearía su carruaje, requeriría de mucho compromiso de su parte. Están demasiado ocupados en sus propios e insignificantes asuntos carnales, manteniendo el orgullo que le produce el poder, y su estilo de vida fácil; demasiado ocupados extendiendo sus pequeños imperios o calculando el nivel máximo de la IGLESIA CORPORATIVA, demasiado ocupados para ser molestados con la labor y el sacrificio que se requiere tan urgentemente en este momento en la obra que el Bendito Creador está llevando a cabo con Su pueblo.

Por lo tanto, hago a todos un LLAMADO A LA ACCIÓN. Quiero tocar la trompeta, de tal manera que la misma ¡retumbe en nuestros oídos! No para reunirlos en torno a mí o a algún ser humano – lejos de eso – pero sí para llevar nuestros corazones a buscar a nuestro Dios, pues sólo Él puede despertarnos y llevarnos a Su servicio con una total dedicación, y grabar en nuestros corazones, en nuestras mentes, de manera indeleble, un claro entendimiento de la responsabilidad que hay en el llamado que tan misericordemente nos ha extendido.

Deje que la alarma suene. Ore por aquellos que están listos a renunciar a todas las cosas efímeras de esta vida física, y al servicio basado en meras palabras a la verdad de Dios, y dedicarse de todo corazón e involucrarse en los asuntos de nuestro Padre Celestial. ¡Póngase de pie ahora mismo y permita que sea contado entre ellos! El tiempo es corto. Los vientos huracanados de la tribulación se aproximan rápidamente.

¿Cómo se encuentra su relación con Dios en este momento? ¿Es real, fuerte y viva? Si no lo es, entonces identifique su problema y fíjese la meta de corregir lo que no esté bien. Fije sus ojos en el Padre Eterno y Su Hijo Jesucristo, pues esta es la Única Fuente que le fortalecerá, y le confirmará. Pero esté seguro de ello, concéntrese en el poder misericordioso de nuestro Todopoderoso Dios. Sea valiente, como Jacob, y no lo deje ir hasta que el Eterno lo haya preparado para que usted pueda hacer su parte, hasta que Él lo haya equipado del todo para que usted pueda cumplir la misión que el Bendito Creador le determine. Dios dice que el justo debe vivir por la fe, que debe caminar y caminar no por la vista, sino por discernimiento. ¿Está usted ahora dispuesto a caminar en la fe de Jesucristo, fe en el Dios viviente, haciendo que su vida sea un sacrificio vivo, continuo, de todos los días, para que el Eterno haga Su obra en usted y en Su pueblo?

¡ESTE es el momento para ACTUAR! Este es el momento para decirle a Dios y a nosotros mismos que somos, de hecho, HACEDORES de la palabra y no tan solo oidores olvidadizos. Este es el momento de ponernos la armadura de Dios y de vestirnos con la coraza de la fe para estar de pie, hombro a hombro con el Mesías.

¿Que si podremos hacerlo? ¿No nos enseña Pablo que "podemos hacer todas las cosas por medio de Cristo quien nos fortalece"? ¿LO HAREMOS O SOMOS TEMEROSOS Y DÉBILES? Les recuerdo simplemente quién es realmente nuestro Dios:

“No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance. El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán”¿ (Isaías 40:28-31).

Quiera nuestro Bendito y Misericordioso Padre Celestial concedernos toda la gracia, la visión y la fortaleza para atender positivamente a Su llamado, y ¡RESPONDER A SU VOZ MIENTRAS Él PUEDA SER HALLADO! El llamado a la acción, de hecho, ha salido del cielo – pero, ¿qué hacemos usted y yo al respecto? Ese es el interrogante trascendental que se nos presenta ahora. Dios está esperando AHORA MISMO por su decisión y por la mía. **********

Traducción del original en inglés "A CALL TO ARMS" escrito por Jim Rector

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